FECHA: 1443-1445.
ARTISTA: Lluís Dalmau.
ESTILO: Gótico.
TIPOLOGIA: Pintura religiosa.
UBICACIÓN: MNAC.
RUTA: Ruta 8.
LLUÍS DALMAU, de origen valenciano, aparece en Barcelona mencionado por las fuentes en 1428 y en época de BERNAT MARTORELL. Trabajó para ALFONS0 EL MAGNÁNIMO hasta 1431 en Castilla y Flandes estando a disposición real a lo largo de la década de los 30 del siglo XV.
Entre 1438 y 1443 abandonó Valencia donde había hecho una serie de obras y se instaló en Barcelona donde se convertió en el pintor oficial de los “consellers” de la ciudad.
Éstos querían un gran pintor para hacer el “Retablo de la Capilla de la Sala del Consejo” y DALMAU supo demostrar su buen arte realizando un diseño que superó la supremacía del taller de BERNAT MARTORELL que triunfaba en aquellos momentos en la Ciudad Condal. Su aportación flamenca de base eyckiana no pasó desapercibida por su excelente hibridación entre la herencia internacional y el primer flamenquismo.
Se le encargó en un principio una virgen pintada para decorar la sala del consejo y consiguió una pieza única en su momento, coincidiendo con su etapa más madura. Es una obra de referencia a la hora de explicar los cambios de la pintura catalana entre 1445 y1455. Consciente de la importancia y transcendencia del cuadro, lo firmó y lo dató para dejar constancia de su autoría.
Es curioso como la vírgen y el niño Jesús quedan centrados en su trono pero colocados en un segundo término, empequeñecidos en contraste con los “consellers” que estan en ambos lados. Parecen éstos tener una perspectiva jerárquica de gran contundencia y presencia. Los grandes ventanales con decoración flamígera están abiertos sobre el paisaje y ayudan a encajar la distribución de los santos y los ángeles. La vírgen está sentada en una espectacular cátedra de madera con tallas esculpidas y decoraciones del gótico pletórico. La belleza de los rostros de influencia flamenca las encontramos en las caras de los ángeles y en Santa Eulalia (con el eculio) y San Andrés (con la cruz), estos últimos actuando como abogados en la presentación de la virgen a los cinco “consellers” que DALMAU intenta retratar. Son: JOAN LLULL, FRANCESC LLOBET, JOAN JUNYENT, RAMON SAVALL i ANTONI DE VILATORTA. La manera de representarlos, arrodillados y con las manos en posición de rezo, se extrae de las pinturas de VAN EYCK que fijó un modelo de representación en sus orantes. Igualmente, el contrato exigía el “pleno parecido individual” de los retratados. Esta obra quedaba completada con una predela con escudos de la ciudad, dos escenas de la vida de Santa Eulalia y San Andrés y una piedad.